Una crema muy minimalista, rápida y saludable para las cenas entre semana, con un aporte nutricional que la podría elevar a super alimento en un santiamén.
La primera vez que probé esta crema estaba en casa de mis papis y me llevaron a comerla en un supermercado cercano a ellos, era la favorita de mi papá y la verdad es que al principio tenía mis dudas porque yo en ese momento no estaba llevando una vida saludable, mis elecciones eran otras, hubiese elegido sin pestañear una cena mucho más a mi «estilo» o sea alguna hamburguesa con extra de queso chorreando o pizza con borde relleno de queso, pero mi mamá me pidió que la probara y le di las gracias porque desde ese día se transformo en una de mis cremas favoritas.
Mis cenas desde que comencé a transitar por esta vida Pi-Consciente son muy ligeras, son las que mi cuerpo me pide y suelen constar de cremas vegetales, sopas o caldos en otoño/invierno y ensaladas en primavera/verano, suelo elegir los vegetales de temporada que a nivel nutricional son los que más valor aportan (lo explico en este post).
Me encantaría decirte que la puedes preparar en tu Batch Cooking, pero te mentiría porque las cremas con brócoli al día siguiente suelen tener un olor muy fuerte y no muy agradable, además varía su sabor y pareciera que acabas de sacarla de una lata. Que no cunda el pánico porque es una crema tan fácil de hacer que no perderás mucho tiempo en la cocina. Yo suelo darle un twist sirviéndola con croutons crujientes horneados con mostaza, puedes saltarte este paso, pero yo no lo haría! Otras ideas para presentarla puede ser nueces, queso feta, escamas de queso parmesano, semillas tostadas…. el límite lo pones tú!
Crema de Brócoli y Queso
Ingredientes
1 cucharada de aceite de coco o de aceite oliva virgen extra
1 cebolla grande, picada
1 zanahoria grande, cortada en cubitos
2 tallos de apio, cortados en cubitos
2 dientes de ajo picados
1/2 cucharadita de mostaza en polvo
1/8 cucharadita de pimienta de cayena
1/2 litro de caldo de verduras o caldo de pollo
2 tazas de flores de brócoli, (ver nota), cortados en trozos tallos y flores separados
1 taza de queso Cheddar
1/2 taza de leche de coco
sal al gusto
Preparación
Calienta el aceite en una olla grande a fuego medio-alto. Agrega la cebolla, la zanahoria y el apio; cocina, revolviendo con frecuencia, hasta que la cebolla y el apio se ablandan, de 5 a 6 minutos.
Añades el ajo revolviendo durante 2 minutos. Agrega la mostaza en polvo y la pimienta.
Agrega el caldo y el brócoli, llevas a ebullición. Cubres y baja a medio fuego. Revuelve ocasionalmente, durante 10 minutos. Cocina hasta que el brócoli esté tierno, unos 10 minutos más. Pasa 2 tazas de la sopa a un bol y haz un puré; devuélvelo a la olla.
Agrega el queso cheddar y la leche de coco, cocina a fuego medio, revolviendo, hasta que el queso se derrita y la sopa esté bien caliente, aproximadamente 2 minutos. Sazona con sal.
Sírvela acompañada del topping de tu elección
Nota
Busca un brócoli que tenga un color verde intenso, evita los que tienen las flores amarillentas o se ven que ya están muriendo. La textura de la crema yo la obtengo con la cantidad de líquido que le agrego, así evito espesarla con patata o harinas, por lo que esta receta es libre de gluten, y para completarla en lugar de tostar pan normal, tuesta pan de trigo sarraceno y obtendrás una receta completamente libre de gluten.
Para la opción vegana sustituye el queso Cheddar por un queso vegano.
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